el goleador que cambió a Chivas

Armando González se convirtió en el rostro del Apertura 2025 para Chivas en un torneo que redefinió la identidad del club. Bajo la conducción de Gabriel Milito, el Guadalajara encontró orden, competitividad y constancia desde las primeras jornadas, pero fue la irrupción ofensiva del canterano la que terminó de marcar la diferencia en una campaña que devolvió al equipo a los primeros planos.

Desde el inicio del certamen, Armando González asumió una responsabilidad inédita en su carrera. Por primera vez fue el delantero titular indiscutido y respondió con una regularidad que sostuvo al equipo en los momentos de mayor exigencia. Sus goles no llegaron en rachas aisladas, sino distribuidos a lo largo del torneo, aportando estabilidad y confianza colectiva.

El registro final habla por sí solo. Con 12 anotaciones, Armando González se proclamó Campeón de Goleo del Apertura 2025, superando a atacantes consolidados y confirmando que su rendimiento no fue circunstancial. Cada gol tuvo peso específico en la tabla y en el ánimo de un plantel que encontró en él a su principal referencia.

Un torneo que marcó un antes y un después

El Apertura 2025 representó un punto de quiebre en la carrera de Armando González. Más allá de las cifras, el delantero mostró madurez táctica, lectura de juego y una comprensión profunda de los tiempos del partido. Supo cuándo atacar el espacio, cuándo fijar centrales y cuándo retroceder para asociarse.

Ese crecimiento individual se reflejó en el funcionamiento colectivo. Chivas dejó de depender de jugadas aisladas y comenzó a construir ataques con mayor claridad, sabiendo que Armando González era capaz de resolver dentro del área con pocos toques.

Goles en los escenarios que definen jerarquía

No todos los goles pesan igual, y Armando González lo demostró en los partidos que suelen marcar el pulso emocional del club. Anotó en el Clásico Nacional frente al América, apareció contra Atlas y volvió a ser determinante ante Monterrey en la última jornada del torneo.

Esos encuentros consolidaron su figura. Armando González no sólo respondió en duelos de alta presión, sino que asumió el protagonismo cuando el margen de error era mínimo. Esa capacidad es la que suele separar a los buenos delanteros de los que trascienden.

Reconocimiento individual con sustento colectivo

El anuncio de la Liga MX no sorprendió. Armando González fue elegido mejor jugador del Apertura 2025, un reconocimiento que refleja tanto su impacto goleador como su influencia en el rendimiento general del equipo.

La distinción no se explica únicamente por el número de anotaciones. Armando González mostró una variedad de recursos ofensivos que ampliaron el repertorio de Chivas: goles con ambas piernas, remates de cabeza y eficacia en jugadas a balón parado. Varias de sus anotaciones significaron puntos directos en la clasificación.

La confianza del cuerpo técnico

Gabriel Milito apostó desde temprano por Armando González y construyó el ataque en torno a sus características. Esa confianza fue clave para liberar al delantero de la presión inicial y permitirle crecer jornada a jornada.

Con el paso del torneo, Armando González se convirtió en un líder silencioso dentro del campo. No necesitó gestos grandilocuentes; su constancia y disciplina marcaron el estándar para el resto del plantel.

Proyección internacional y Selección Mexicana

El rendimiento no pasó desapercibido fuera del entorno rojiblanco. Todo apunta a que Armando González será considerado por Javier Aguirre en los primeros compromisos de 2026 con la Selección Mexicana, especialmente si la convocatoria prioriza a futbolistas del torneo local.

Para Armando González, esa posibilidad representa un paso natural en su evolución. Sumar minutos internacionales le permitiría mantenerse en el radar rumbo al cierre del proceso mundialista y competir en un contexto distinto al de la liga.

El siguiente desafío: sostener el nivel

El Clausura 2026 se presenta como una prueba distinta. Armando González ya no será la sorpresa del torneo, sino el delantero a neutralizar. Esa condición exige ajustes, lectura y una evolución constante para evitar que el rendimiento se estanque.

En ese escenario, la llegada de Brian Gutiérrez puede potenciar su juego. Un mediapunta con perfil asistidor podría maximizar los movimientos de Armando González dentro del área y generar una sociedad ofensiva más fluida para Chivas.

Un referente para la cantera

Más allá del primer equipo, Armando González se convirtió en un ejemplo para las fuerzas básicas del club. Su historia refuerza la idea de que el proyecto deportivo tiene espacio para los jóvenes cuando el contexto es el adecuado.

Chivas encontró en Armando González algo más que goles: encontró una narrativa de identidad, paciencia y crecimiento interno que conecta con la esencia histórica de la institución.

El peso simbólico de un torneo consagratorio

El Apertura 2025 quedará como el torneo en el que Armando González pasó de promesa a realidad. Ese proceso no fue inmediato ni lineal, pero culminó con un reconocimiento que valida el trabajo sostenido a lo largo del semestre.

Para Chivas, contar con Armando González en este nivel significa estabilidad ofensiva y una base sólida para competir. Para el propio jugador, es apenas el inicio de una etapa donde la exigencia será constante y el margen de error menor.

Relacionado